Así se llama una zona del Sureste de Gran Canaria perteneciente al municipio de Ingenio y situada entre el pueblo de Ingenio y el barrio de Aguatona. Tiene además como accidentes particulares que llevan todos ellos el específico de Malfú: una montaña, un barranco y una cañada (La toponimia de Gran Canaria 1997: II, 213, y GAC 193 F2).

La montaña, que es el accidente principal de la zona y el que supuestamente primero ostentó el nombre, está situada en el centro del municipio de ING y es una verdadera atalaya desde donde se divisa un extenso panorama, frontera natural entre la costa de Gando y la vega de Aguatona. Ha sido registrada en documentos locales como Marfuz, Marfú, Malfús y finalmente Malfú (Sánchez Valerón 2007: 282-283). Otro autor grancanario, Pérez Hidalgo (2011: 477-478), ha dedicado un largo comentario a este topónimo en su libro sobre algunos lugares de Gran Canaria, y aparte de decir que la forma Malfú "es incorrecta" (¿por qué es "incorrecta" si es la que se ha impuesto en la actualidad?), sin explicación alguna, ofrece numerosos testimonios antiguos, desde el siglo XVI, que hablan de la importancia de este lugar para los habitantes de esta zona del sureste de la isla.

Dice también Pérez Hidalgo que "no ha sido catalogado como topónimo aborigen". Esto no es verdad. Como guanchismo aparece en la listas de Álvarez Rixo (1991: 76), citado como Manfur, sin más indicativo que su pertenencia al p.j. de Agüimes; como Manfur aparece también en las listas de Chil y Naranjo (2006: 179), de Millares Torres (1980: 312) y de Bethencourt Alfonso (1991: 394), repitiendo los tres la cita de Maximiliano Aguilar y considerado aquí como "localidad", a lo que Bethencourt añade el comentario: "Ignoramos si esta palabra se refiere a la montaña Marfus, en El Ingenio"; y finalmente, como Manfur lo recoge Wölfel en sus Monumenta (1996: 1029), que no sabe cómo interpretarlo.

En la actualidad, como decimos, la única forma que se oye es Malfú, pero no descartamos que fueran ciertas tanto la forma Manfur de los registros decimonónicos como las que Sánchez Valerón encontró en los registros locales. Un nombre así, ajeno al vocabulario español, es lógico que ande en variantes como las señaladas. El topónimo canario que encontramos más cercano a este es el Afur de la Sierra de Anaga de Tenerife.