En El Hierro existen una famosa Cueva de Tamajuelgo situada en la parte alta de la vertiente sur de la isla, entre Tiñor y San Andrés, municipio de Valverde, que con seguridad fue habitada en la época prehispánica y que lo ha seguido siendo hasta la actualidad (Trapero et alii 1997: 136).

Es lo más probable que se refieran a este mismo lugar dos anotaciones que aparecen en las Antigüedades de la isla del Hierro recopiladas por el escribano García del Castillo en los años primeros del siglo XVIII (2003: 175 y 183) con el nombre de Tamojuerco. Allí se le describe como unas tierras donadas en 1564 a un tal Álvaro Yanes en las que hay cuevas y corrales, sin más precisión.

Con el mismo nombre de Tamajuelgo con que nosotros lo recogimos aparece también en las listas de guanchismos de El Hierro de Bethencourt Alfonso (1991: 378), en el catastro municipal, en las fichas de campo que recogió el equipo de Manuel Alvar en la isla y en el GAC (63 E5).

El término Tamajuelgo podría estar compuesto por dos elementos léxicos que por su repetición en otros topónimos de las Islas debieron tener en la lengua de los aborígenes funcionalidad independiente. Por una parte, el segmento tama que aparece en tantos topónimos herreños en particular (Tamaje, Tamájesa, Tamásina, Tamaduste y otros) pero también canarios en general (Tamadaba, Tamaimo, Tamargada, Tamadiste, Tamagorte, Tamase, etc.) y que Wölfel (1996: 825-826) identifica con un elemento morfológico del guanche, con el valor de 'perteneciente a', aunque dice no tener apoyaturas del bereber. Por la otra, el segmento juelgo ha pervivido de manera independiente como término apelativo en el habla popular de los herreños con el sentido de 'mezcla de muchos granos que se siembran para pasto', motivación que puede estar en la base de la denominación de esta zona, además de estar de manera independiente en otro topónimo herreño que recogimos con las variantes Juelgo, Jogo y Juego, a cuya entrada remitimos.