Aclaramos de entrada que no hay en Canarias un topónimo con esta sola palabra, pero sí varios topónimos en que esta palabra forma parte de ellos, incluso en formas léxicas compuestas, y con formas tan extrañas y variantes que no dudamos que el término borracho ha sido el resultado de un proceso de etimología popular. Los topónimos son dos, uno en La Palma y el otro en Fuerteventura.

El de La Palma aparece en el corpus de la Toponimia menor de la isla recogida por Díaz Alayón con dos entradas: Pino de Bacía Borracho y Vacía Borracho (1987b: 422 y 783), situado en la zona de Hoya Grande en la parte alta y de monte del municipio de Garafía. Naturalmente esas dos entradas significan algo más que dos formas de escritura, en el fondo una duda de interpretación.

El de Fuerteventura presenta unas mayores y más importantes diferencias. En las fichas de Alvar aparece como Vacía Borrachos, tomado del mapa militar, mientras que en la Toponimia de Fuerteventura de su Cabildo insular (2001: III, 39) aparece como Base Borracho y con tres topónimos particulares: un barranco, una fuente y un tablero, situado en la Costa de las Salinas, al suroeste de las Parcelas, municipio de Puerto del Rosario.

Esta coincidencia o cuasicoincidencia en la formulación léxica de estos topónimos no puede ser casual ni dependiente la una de la otra. Ni para la palabra vacía (o bacía) ni para la palabra base tenemos una explicación independiente y autónoma en la toponimia canaria, razón por la que las juzgamos componentes de una unidad léxica superior que englobaría ese segundo componente que ha llegado a interpretarse como borracho o borrachos, algo así como *Basiborracho o *Baseborracho y que aventuramos de origen prehispánico, aunque del todo desconocido.

El término más próximo a este *borracho es el canarismo borrallo, un término de origen portugués con que se nombra a las cenizas que quedan después de quemarse la leña, y desde ese significado primario llega a tener el de 'rescoldo' y 'color ceniciento', pero en absoluto creemos que sea borrallo el que está en la motivación y en base de los topónimos aquí estudiados.