Cueva de Jacó es un topónimo de La Gomera situado al suroeste del caserío de Las Tías, en el pago de Arguamul, municipio de Vallehermoso.

Perera López (2005: 10.56) lo recogió también con la variante Jacobo, que parece ser un término atraído por el deseo de interpretar el opaco Jacó. Si el accidente fuera realmente una cueva, tal cual relata el topónimo, podría interpretarse el término Jacobo como originario y referir un antropónimo, como propietario de la tal cueva, procedimiento que suele ser común en la toponimia del Archipiélago, pero nos informa Perera que el lugar no es propiamente una cueva, sino un "cejo", es decir, un saliente natural del risco (en Gran Canaria, propiamente un "solapón") que puede servir de abrigo, y en este caso es más verosímil que el término originario sea Jacó, y que este sea un guanchismo, al que podría ponerse en contacto con otros varios topónimos guanches: Chajaco y Jaca en Tenerife, Jachona, Jacón y Jacota en La Palma, etc.

Wölfel recoge en sus Monumenta (1996: 817) un Jaque "localidad" de La Gomera desde una cita de Millares Torres, y lo analiza junto al Jaco (o Xaco o Yaco) "caserío" de Granadilla citado por Viera y por otros autores posteriores, pero nada dice de ellos desde el punto de vista lingüístico más que se parecen al nombre de Jaco Semidán que tuvo el hijo de Artemi Semidán.